Los productos frescos de la zona, con mar y montaña, la mejor elección.

Sin desmerecer los magníficos pizzeros, por ejemplo, que en hornos de leña preparan suculentas pizzas, lo cierto es que Tarifa posee un mar en el voraces, calamares y otras especies le dan una diversidad a su cocina marina excepcional. Pero sin duda hay una estrella: el atún.
La época de la almadraba, que comienza por el mes de mayo, proporciona los especímenes más sabrosos por ser un pescado con más grasa que lo hace tener una sustancia singular.
En cuanto a la tierra, es típica la carne de Retinto, una especie de vacuno desarrollada en la zona.
Y no dejemos de lado las hortalizas y verduras, que en Tarifa tienen gran importancia y una frescura singular.
Los caracoles son otro de los platos típicos, así como diferentes preparaciones del cerdo, muchas veces alimentado con bellota y de una calidad excepcional.
Algunos chef que buscan su sitio en Tarifa están creando una escuela con gran proyección y no sería de extrañar que en breve alguno de los establecimientos más emblemáticos lograran el preciado galardón de ser incluidos en la Guía Michelín.
Tarifa es un exponente de la cocina mediterránea y un referente de la cocina andaluza.